Carta a José Antonio Luengo

CARTA A JOSÉ ANTONIO LUENGO

En relación a las distintas declaraciones efectuadas recientemente por José Antonio Luengo Latorre, actualmente responsable y coordinador en el equipo de apoyo socioemocional de la Unidad de convivencia, dependiente de la Subdirección General de Inspección Educativa de la Consejería de Educación de la Comunidad de Madrid y Decano-Presidente del Colegio Oficial de la Psicología de Madrid, sobre la necesidad de incorporación en los centros educativos de la figura del psicólogo educativo.

Sorprende que desconozca las estructuras educativas existentes que desempeñan un papel clave en el sistema educativo al ofrecer apoyo y recursos tanto al profesorado como a los estudiantes y a sus familias y que contribuyen a la mejora de la calidad educativa, como es la red de orientación educativa.

La red de orientación cumple diversas funciones que son fundamentales y que contribuyen a la mejora de la calidad educativa y que le recordamos por si las ha olvidado o nunca las ha conocido:

  • Funciones de formación y asesoramiento a los docentes para mejorar sus habilidades pedagógicas, didácticas y el enfoque educativo, tales como estrategias para la atención a las diferencias individuales, métodos de enseñanza innovadores, gestión de las aulas, etc.

  • Funciones de apoyo a la orientación educativa participando con tutores y profesorado en la identificación de las necesidades específicas del alumnado, ofreciendo orientación a nivel académico, emocional y de desarrollo personal y colaborando también en la atención y asesoramiento a las familias.

  • Funciones de detección y atención a las dificultades de aprendizaje, conducta, socioemocionales o adaptación del alumnado, trabajando conjuntamente con el profesorado para implementar estrategias específicas.

  • Por último, funciones en el desarrollo de programas y recursos educativos específicos para mejorar el rendimiento académico, el bienestar socioemocional del alumnado y contribuir a la mejora de la convivencia en los centros.

Estas funciones se trabajan desde la prevención primaria en la red de orientación desde una perspectiva proactiva, sistémica y sistemática.

Dentro de la red de orientación se encuentran los profesionales de la Orientación Educativa con una formación de base de las especialidades de Psicología, Pedagogía o Psicopedagogía.

Por ello nos preguntamos qué sentido tiene que ustedes defiendan la necesidad de contratar “psicólogos educativos” en los centros y de formarlos cuando ya existe un proceso transparente y con garantías de calidad para la contratación pública de profesionales de la orientación. No se entiende esta propuesta de contratación a través de empresas privadas para trabajar en contextos públicos, sin tener control sobre el proceso de selección si no es porque puedan existir intereses que desconocemos.

Estos posibles intereses corporativos no pueden condicionar una política educativa, que lejos de tener unos objetivos que contribuyan a una educación inclusiva y equitativa de calidad para todo el alumnado madrileño, únicamente parchean y llenan los centros de personas externas a los mismos con un corto recorrido en el tiempo, poca influencia y consolidación que permita cambios estructurales y metodológicos de mayor calado y profundidad.

Entre las soluciones que proponemos, no está la de contratar psicólogos educativos, externalizando y privatizando la atención a la diversidad, sino:

  • Respetar la ratio establecida por la UNESCO (1 orientador/a por cada 250 alumnos/as).

  • Ajustar la ratio alumnado/profesorado, facilitando el desarrollo profesional docente, incluyendo la detección de necesidades e intervención socio-educativa adecuada.

  • Aumento del cupo de profesorado teniendo en cuenta las necesidades a nivel socioeducativo de los centros, garantizando una atención más individualizada y una detección precoz de dificultades socioemocionales y/o de aprendizaje y eliminando barreras de acceso y participación.

  • Incluir profesionales Técnicos en Integración Social, no en función de categorías diagnósticas sino según las necesidades educativa del alumnado.

  • Volver a establecer tiempos de coordinación con otros servicios (sociales, sanitarios…).

  • Aumentar por parte de la Consejería de Sanidad el número de profesionales de Salud Mental que puedan atender al alumnado derivado siguiendo los protocolos elaborados desde los centros siguiendo instrucciones de la Subdirección General de Inspección Educativa.

Todo lo anterior permitiría a la red de orientación desarrollar sus funciones con eficacia y sin la carga de burocracia que en los últimos años dificulta e impide el desarrollo de la labor de prevención, apoyo y asesoramiento colaborativo en las estructuras de los centros, lo que haría innecesario la contratación de personal externo a los centros.

                                                                                                                                                                               Madrid, 14 de febrero de 2024

                                                                                                                                                                                PADME PÚBLICA